La libertad es como el agua, siempre se cuela por las grietas, y no hay tiranía o embuste propagandístico mayúsculo que no las tenga. Probablemente no será la mejor película de la Historia, y quizás dentro de un año ya nadie se acuerde de ella, pero ‘The Interview’ ha servido para demostrarle al mundo que los viejos tiempos de censuras y ataques a la libertad no han pasado. Ahora se hacen de otra manera. Ya nadie va a colarse en una sala de montaje con unas tijeras, como antaño, ahora es más fácil: hackeas a la productora, la avergüenzas, la chantajeas y puede que lo consigas.